viernes, 27 de mayo de 2011

RECHAZO

Mi ego va a reventar…
El nuevo error,
El mismo error,
El error de siempre.

La distancia de las palabras,
El frio de tu aliento,
La mirada extravía,
Las manos calientes.

El ego viene y se da un paseo,
Yo lo miro y le detesto,
¿Por qué no te dejas seducir?
¿Por qué me seduces tú a mí?

Tu gesto se ha pronunciado,
Y la decisión ha sido tomada
Mi ego sigue latente en el conflicto;
Cuando la bomba está estallando.

Y siento sin saciedad,
que detesto no tenerte,
Pues bastante odio el rechazo,
Ya que el rechazo lo desprecia mi ego
Pero eso de no tenerte...
Es lo que siempre hallo.

martes, 24 de mayo de 2011

EL PIANISTA

El piano agonizante, la pared de rombos grises,
la mujer camina por aquel pasillo lúgubre.

El pianista del tacto,
Se acerca con mirada,
El barullo de su voz apagada,
Con curioso sonido me arrebata.

Ese beso de las noches,
y las historias de la madrugada;
Las hojas en el viento,
Cuando cruzo su mirada.

Su presencia esquiva
Es una vela que no se apaga…

Y quema el fuego ardiente,
De la luna embriagada,
De la pasión desbordante,
De aquel rose, Ella, extasiada.

Los temores que atormentan,
El pasado que molesta,
Las heridas que no cierran,
Buenas ilusiones… lo congelan.

Y todo vuelve a ser como antes
Cuando la esencia era energía,
Las almas eran danzantes,
Y nosotros, montañas que se amaban

Pero el tiempo es prudente
A la vez que inclemente
Deja que todo esto pase,
Y camina aquí a mi lado,
Que las horas transcurran…
No soltaré tu mano,
Mientras a mi lado fluyas…

jueves, 19 de mayo de 2011

LA BRUJA NEGRA

La Bruja Negra castiga su amado.
La Bruja Negra conduce a su hombre y magnánimo amante al oscuro bosque nocturno, a la media noche, cuando los cuervos se acercan y la luna opaca el cielo tempestuoso. En el macabro paisaje; la Bruja Negra seduce a su hombre... viste púrpura, y ajusta a sus piernas ligueros de encaje y botas de cuero puntiagudas. Su cabello se desborda flagrante con su brillo seductor. La cabellera le cubre sus pechos, mientras le forra las caderas. Sus ojos alumbran como las estrellas, y su mirada se trasforma en la de un lobo hambriento.
La Bruja, sulfurada, lo toma de las manos y le entierra las uñas afiladas muy dentro del costado derecho. Lo empuja hasta la planicie, le desgarra las vestiduras y lo arrodilla en medio de la nada.
-          Hoy tendrás tu castigo… –Repone la Bruja Negra mientras mira con satisfacción casi heroica–.
El hombre observa con sigilosa mirada a la espera de su apasionada recompensa, por ser tan buen amante, tan caluroso… tan digno… merecedor de una seducción inmensa. Con un gesto de odio, la Bruja Negra lanza un conjuro, dirige sus menos a la tierra, que empieza a emanar fuego...
-          Quiero verte sufrir… –Repone, mientras acaricia sus los cabellos–
El amante infiel se estremece asustado mientras el fuego le quema, y el calor le calcina los huesos. Su cuerpo erosiona con sudor y sangre. Solo se escuchan sus gritos, sus tristes y lamentables alaridos... pero el bosque está enterrado lejos de los dioses del Olimpo, y la casta mano de Palas Atenea no puede desabrochar la quimera. El perverso hombre se retuerce mientras suplica con sincera compasión que detenga aquel sufrimiento.
Pero la Bruja Negra solo sonríe mientras el hombre perturbado gime y se lamenta. Ella, empieza con su segundo padecimiento y elevando una enorme nube negra, hace caer ácido y veneno descompuesto sobre su cabeza, así, desde el cielo le quema, le calcina el cerebro, mientras observa como le enerva.
Ni siquiera a lo lejos, en el bosque, se escucha el crujir de su piel, gritos de dolor insaciable y un desaforado martirio. La apasionada tortura de la Bruja Negra no sería evitada por ningún blanco ángel ni cruel demonio.
-          No más por favor, por el amor que te he tenido, que he hecho para merecer tal duelo? –Responde mendigante el lamentable hombre–.
Antes de responder, la Bruja Negra, con sus pulmones, envía al rostro de lo que queda de hombre, en el último halo de fuerzas y de vida dirigiendo una densa neblina grisácea. Su aire pesado y sutilmente sanguinario, tortura al hombre, quien respira mientras le carboniza el alma. La Bruja Negra, extasiada, le mira con cariño y tremendamente satisfecha de llevar a cabo su cruel cometido, detiene las torturas, y pronuncia:
-          Mañana, a la media noche, repetiré mi sentencia, hasta que hagas conciencia, de tu impúdica esencia.

miércoles, 18 de mayo de 2011

DESAHOGO

Sale una mujer corriendo de su cabaña con dirección a la costa, gritando:
-       ¡Hernán Emilio! ¡Hay una mujer ahogándose en el mar!

El hombre, que andaba en su cuento, no se había percatado de lo que ocurría, a lo que salió detrás de la mujer:
-       Carmen Cecilia, que sucede, ¿qué pasa con la algarabía?

La mujer molesta, le mira con rencilla y señala con el dedo algo angustiada:
-       Hay una mujer a lo lejos de la playa ahogándose en el mar, está quieta, no se mueve ni se inmuta. Se está dejando ahogar.
-       Entonces iré a ayudarla, responde Hernán Emilio, y se lanza velozmente a la mar.

Al cabo de media hora, y con mucho esfuerzo en sus brazos, Hernán Emilio, regresa con el cuerpo de la mujer, que parece seguir consciente, la socorren e interrogan:

-       ¿Quién eres?

La mujer, que parece no escuchar nada, empieza a hablar una sarta de sandeces incomprensibles, casi que en un idioma indescifrable.

-       ¿Cómo le podemos ayudar?

La mujer sigue hablando desesperadamente… Al final, Hernán y Carmen, se dan cuenta que la mujer es ciega, además, responde a las preguntas sin coherencia, es sorda. No le prestan atención, los socorristas continúan con su interrogatorio, preocupados por prestar ayuda:

-       ¿Se encuentra bien? ¿Le podemos ayudar en algo?

De repente, la mujer recobra algo de consciencia en sus palabras y empieza a contar su historia. La mañana que ya se agotaba desde que la mujer fue rescatada en la madrugada, llegaba con su calor de medio día. La mujer poco a poco recuperaba el color, y al tiempo que contaba y contaba su hazaña, recobraba la vista, la audición.

Los espectadores sorprendidos la miraban, con asombro y algo de temor. Pero la mujer continuaba escupiendo sus ideas, su dolor

Al llegar la noche, después de mucho parlotear; la mujer termina su historia, y alejándose con una sonrisa hermosa, a lo largo de la costa, se despide, ya no hay más. Casi que trotando se retira, y les dice:

-       Gracias. ¡Me he logrado desahogar!

martes, 10 de mayo de 2011

¿EN QUÉ NOS PARECEMOS?

Que en qué nos parecemos te preguntas?
Te parece acaso poco, el reflejo de las decepciones?
Parece a veces mirarme en un espejo,
Nos enturbian, nos abruman; nos ensordecen… Las pasiones…

Cuando callas, cuando enfureces, cuando erras…
Idealizas al extremo, y en el mismo extremo besas
Ya he visto estas lágrimas otros días, otras horas.
Y mil veces antes, te he escuchado gritar: Ya basta por ahora…

Yo te veo, y a mí misma es a quien observo,
Tenue imagen reflejada en esos, tus ojos negros
En el grueso de tu voz impaciente, latente y abrazadora
Y esos dientes nacarados de amores y peligros… de textura ensordecedora…

No recordemos más esta absurda historia,
Cansada estoy de tantas desiluciones...
De filósofos, músicos, enrolladores, y cantores
Pues conmigo me basta, de hartas y estúpidas alucinaciones…


Con cariño, para alguien que ama como yo, sueña como yo, desea como yo, y recuperará el aire… como yo…

TU NO SABES AMAR

...Tú No Sabes Amar
de Julio Florez...


'Tú no sabes amar; ¿acaso intentas
darme calor con tu mirada triste?
El amor nada vale sin tormentas,
¡sin tempestades… el amor no existe!


Y sin embargo, ¿dices que me amas?
No, no es el amor lo que hacia mí te mueve:
el Amor es un sol hecho de llamas,
y en los soles jamás cuaja la nieve.


¡El amor es volcán, es rayo, es lumbre,
y debe ser devorador, intenso,
debe ser huracán, debe ser cumbre…
debe alzarse hasta Dios como el incienso!


¿Pero tú piensas que el amor es frío?
¿Que ha de asomar en ojos siempre yertos?
¡Con tu anémico amor… anda, bien mío,
anda al osario a enamorar los muertos!'

domingo, 8 de mayo de 2011

PERDIÉNDOME EN SUS LABIOS

Pero, que estoy haciendo?
Que me está pasando?
Hace unos minutos lloraba y ahora me pierdo en sus labios...


Es lo correcto?
Me he equivocado?
Aún no lo sé, pero me siento más libre que nunca...


La vanidad, el orgullo, la prepotencia...
Las he derribado...


Ahora soy yo, somos tu y yo, éramos tu y yo, ahora solos 'somos'...
Y que bien se siente...


Porque aunque no creas, y estés tan seguro.
Lo volveré a intentar, y cuando esté perdiéndome en sus labios.
No habrá forma de volver a mirar atrás.

miércoles, 4 de mayo de 2011

MI DESPEDIDA

Mi despedida es tu despedida.
Sin dolor, con la mente clara, ideas concretas, despejadas.

Mi despedida es esta canción.
El sol salió antes de que la tempestad terminara.

Mi despedida no conoce sentimientos.
Pues los sentimientos son como los espejos, y se reconocen unos a otros. Cuando no hay se es parco, sin vida, sin don de existencia por sí.

Mi despedida no se arrodilla.
Me siento como el águila que acaba de romper sus uñas y su pico.

Mi despedida ya no es dolorosa.
Ya no se trata del dolor de amar; sino la alegría de olvidar sin sentir nada.

Mi despedida, no tiene lágrimas.
No necesito tu cuerpo, ni tus manos, ni tu alma. Ya no hay deseo, ni gusto, ni voluntad.

Mi despedida no tiene amor.
Si tuviese amor, no me sentiría tan fuerte, me sentiría débil y destruida.


Mi despedida volverá a tocar tu puerta.
Tus palabras son tu humillación, tu destino es el dolor, el sin sentido es tu predestinación.

¿Sabes cómo me siento?
No me interesa lo que pienses. Le di suprimir al botón de tu rostro. Al botón de tu ‘amor’. Al botón de cualquier recuerdo, que haya existido.

Pero algo de lo que no quiero despedirme, y le daré la bienvenida siempre que recuerde tu nombre: Aprender que antes de ser libre, antes de disfrutar la vida, y antes de ser feliz… Aprendí el poderosísimo valor de la Crueldad